miércoles, 10 de febrero de 2010

ASAMBLEA BM LA ROCA


Ayer martes, 9 de febrero,  tuvo lugar en el CC La Roca,la asamblea del BM La Roca. La esperada asamblea en las cual, como han recogido muchos medios de comunicación, la junta directiva presentaría su dimisión. El acto se inició con la intervención del presidente Joaquim Planas, el cual hizo un repaso a la historia del club y a las dificultades que viven en los actuales momentos. 

Luego Sebastià Borrell intervino explicando las líneas económicas del club. El presupuesto de la temporada 2009-2010 es de 172.500 euros, de los cuales 15.800 euros los aporta el ayuntamiento de La Roca, y Borrell desgrano las tres partidas municipales que engloban esta aportación municipal. Siguió la intervención de Pedro Pérez Zarzosa, explicando la evolución del BM La Roca desde 2005, cuando se puso en marcha el proyecto “Rosca 2010”.

Concluyó Sebastià Borrell explicando la evolución del conflicto abierto con el Ayuntamiento. Borrell argumentó que el BM La Roca siempre ha hecho las cosas sin ruido y que cualquier restricción en horas de entrenamiento será perjudicial para el BM La Roca. Recordemos que el club tiene más de 400 deportistas y 29 clubs. También afirmó que lo importante de la asamblea -y donde han incidido los medios de comunicación- no es la dimisión de la junta, sino qué pasará con los jugadores, con los equipos, con el club si se decide finalmente reducir las horas de entreno. Esa es la clave, continuó, “queremos un club que vaya compitiendo, sin grandes éxitos, o queremos un club que pueda estar en la élite del balonmano”.

A continuación se abrió un turno de palabra. Entre los que intervinieron destacamos la de Manuel Álvarez, regidor de Deportes, y Rafael Ros, alcalde de La Roca. Ambos asistieron como socios, pero en sus intervenciones quisieron puntualizar la postura del Ayuntamiento. Esta actitud fue recriminada por el moderador de la junta, Artur Barrio. En su intervención el regidor de deportes mantuvo la postura ya conocida. Es decir, que al ser el Pabellón municipal, todos los clubs que se formen en el municipio tienen derecho a entrenar. Y afirmó que los entrenos del BM La Roca le cuestan al consistorio 90.000 euros y que el conserje del Pabellón viejo cuesta 25.000 euros. Esta afirmación provocó los silbidos de los socios. Recordemos que el Pabellón no será propiedad del Ayuntamiento hasta dentro de 25 años y, mientras tanto, una empresa privada explota la instalación y por eso cobran por el servicio.

La intervención del regidor de Deportes fue contestada por el presidente Joaquim Planas. Dio a entender que a más de uno le interesa que la actual junta dimita para colocar otra más afín a las resoluciones que el consistorio pueda tomar.

Después intervino el alcalde Rafael Ros. Quiso ser reconciliador. Habló de las instalaciones deportivas que hay en el municipio, que nunca han pretendido ir en contra del BM La Roca, que a día del martes aún no sabían cuántas horas necesitaría para entrenar el CB La Roca. Y les pidió que, una vez conocida la demanda se sentaran a hablar para llegar a una solución.

El problema de fondo, que salió en diferentes intervenciones, era económico. El consistorio no tiene dinero para cubrir todas las demandas deportivas. Al final se demostró que hay suficientes espacios para que se hagan actividades deportivas. Con lo cual quedó patente que el problema no era económico ni político, sino de entendimiento. El conflicto no hubiera surgido de haberse hablado claro, por parte del consistorio, y se hubiera llevado a la práctica las palabras finales del alcalde Ros. Esto es, actualmente no saben las demandas horarias del CB La Roca y que cuando se sepan se sentaran y estructuraran las necesidades de ambos clubs con las zonas deportivas existentes en el municipio.

La asamblea concluyó con la intervención del presidente Joaquim Planas. De momento la junta directiva continúa con su labor esperando acontecimientos del Ayuntamiento. Si estos son perjudiciales para el BM La Roca, convocarán una junta extraordinaria en la cual dimitirán.

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